domingo, 6 de septiembre de 2009

Luna lunera



Así se veía la luna anoche desde mi casa. La foto no es muy buena, mi máquina digital no sirve para fotos nocturas o yo no sé usarla, pero da una idea, había humedad y se reflejaba en las partículas de agua en el aire.

Siempre me he sentido atada al cielo nocturno, la luna, las estrellas, han estado ahí desde que tengo memoria.

Algunos de mis recuerdos más antiguos están ligados a ella y al cielo estrellado; la primera vez que identifiqué una constelación, las historias de mi padre, mis lecturas de cuentos de piratas ...
Cada vez que miro al cielo todo eso se une y crea una experiencia díficil de describir, donde lo principal es la sensación de sentirme observada por esas lucecitas tan distantes, sentir que comparada con ellas soy un nanosegundo o menos en el tiempo del universo, que soy menos que un grano de polvo dentro de toda esa inmensidad. Me siento pequeña y al mismo tiempo importante porque mis ojos pueden apreciar esa belleza y mi mente captar esa inmensidad que en realidad no puedo ni imaginar.

Siempre que miro al cielo de noche, con todas las estrellas ahi, la gran columna que es la vía láctea y el resto de las constelaciones, algo se mueve en mi interior, a veces como anoche termino llorando sin saber bien porque, pero consciente de que es porque algo se conectó con lo más profundo de mi para mostrarme el camino, para hacerme consciente de quien soy, para no dejarme olvidar esa parte de mi que es la más auténtica y a la que debo aferrarme más que nunca.

6 comentarios:

panterablanca dijo...

Claro, después de todo, somos polvo de estrellas ;-)
Besos felinos.

-=CID=- dijo...

Lo malo es que en las grandes ciudades no se ven las estrellas debido al exceso de luz, porque realmente es muy bonito como bien dices.

Crika dijo...

¡vaya, qué casualidad! a mí también me ha dado por fotografiar la luna cuando paseo por el campo con mis niños y mis perras ;)
Lo cierto es que estuve haciendo pruebas con flash y sin él pero el resultado no era demasiado satisfactorio: ¡parecía que era de día! A ver si te paso alguna por mail.
Yo solía mirar las estrellas en las noches de verano con mi padre, recostados en un hacama y comentado las pocas constelaciones que era capaz de ver. Siempre que las miro recuerdo aquellas noches con él y siempre tengo, como tú, la misma sensación de insignificancia de mi existencia en comparación con el universo. Eso me hace recordar la relativa importancia de cosas que antes eran taaaaaaan enormes y ahora no dejan de ser pequeños detalles sin importancia

Selket dijo...

Pantera, eso mismo, polvo de estrellas que se ha agrupado por un ratito.

Cid, es una lástima, por eso cada vez me gustan menos las grandes ciudades, creo que se pierde mucho de la esencia humana en ellas. Por suerte donde vivo el cielo puede verse muy bien, y si viajas 30 min ya lo ves en todo su esplendor, es abrumador.

Crika, a ver cuando me mandas esas fotos que ya quiero verlas. Vamos a tener que tomar un curso de fotografía a ver si nos salen mejor.
En mi opinión no hay nada mejor que un recuerdo ascociado a estrellas.

Gracias a los tres por compartir el sentimiento, besos.

Crika dijo...

pues fíjate que me lo ha dicho mi marido....y me lo estoyo planteando!! no me importaría ir contigo a clase ;)
besos luneros

Selket dijo...

Jaja, sería genial, el único problema es que nos van a salir carísimos los pasajes jajaj.