sábado, 3 de octubre de 2009

Frente al espejo



¿Quién eres tú?

¿Por qué me miras desde el espejo?

¿Te conozco acaso?

Tu cara se parece a la mía, pero esa no soy yo.
Tus ojos y tu pelo son del mismo color y largo que los míos, pero esa no soy yo.

¿Dónde está mi mirada?
¿Dónde está mi alma?


Dicen que los espejos son portales al más allá, si es así el reflejo que
veo debe de ser el de otro Yo,
que vive una vida paralela
y que tampoco se reconoce en mi cara.

3 comentarios:

Sayuri dijo...

No sé si el espejo es el portal del más allá, pero si es importante verse reflejado en él. Tal vez es el portal a nosotros mismos.
Reconozco tu sensación, ese día, el que sentí que no me reconocía empecé a buscarme.
Un beso

panterablanca dijo...

Conozco esta sensación de la que hablas. Te miras al espejo y la imagen que ves eres tú, pero más cansada, más ajada. Y no es cansancio físico, es cansancio emocional, el mismo cansancio que envejece y desluce tu cutis, y que repito, que no tiene nada que ver con el cansancio, ni siquiera con la edad... Sí, creo que sé de lo que hablas.
Besos selváticos.

Selket dijo...

En eso estoy, buscando que el espejo me refleje entera, porque hoy sólo refleja mi carne, mi exterior.
Creo que toos en algún momento pasamos por eso, yo he caído en la cuenta de que estuve mucho tiempo sin mirarme de verdad en el espejo, casi ignorando lo qeu en él se reflejaba. Ya no más.
Besos